Seminario sobre la Cooperación Sur-Sur y Reunión de Cooperación de la CSA

Se ha celebrado en Florianapolis (Brasil), entre los días 27 a 30 de agosto, dos Seminarios en los que USO-Sotermun ha estado presente por medio del compañero Santiago González. Uno de ellos, el de la Cooperación Triangular y Sur-Sur estaba organizado por la Red Sindical de Cooperación al Desarrollo (RSCD) de la CSI. El otro correspondía a una Reunión sobre Cooperación de la Confederación de los Trabajadores de las Américas (CSA).

En el primer Seminario participó, además de los miembros de la RSCD, entre ellos una relevante representación de sindicatos del Sur, como COSATU (Sudáfrica), KSBSI (Indonesia), de Timor Este, Corea, República del Congo...y una amplia delegación de sindicatos de la CSA, Toni Tuján, portavoz de la sociedad civil, incluidos los sindicatos, en las diversas Conferencias de Alto Nivel sobre Cooperación, la última en Busan el pasado 2011.

Se hizo un repaso y se discutieron los caminos de la arquitectura de la cooperación y se constató que bajo el paraguas de la cooperación Sur-Sur no todo eran buenas prácticas que corrigieran los defectos de la cooperación Norte-Sur. Por el contrario, en el caso de la pretendida cooperación de China, se disfrazaba como cooperación un simple trueque, un pago en especie por la obtención de recursos y materias primas del país receptor a cambio de la construcción de infraestructuras, en las que ni se empleaba la mano de obra local, ni se transfería tecnología e incluso se prescindía de proveedores locales.

Se rechazó, pues, una distinción simplemente semántica de la cooperación, sea N-S ó S-S, reclamando que se distinga entre cooperación justa y solidaria, frente a la interesada, asistencialista y dependiente. En todo caso, se comprendió mejor el hecho de que en la Conferencia de Busan, mencionada anteriormente. China, junto con otros países, forzaron en la declaración final la “voluntariedad” en la cooperación S-S de los principios de París, Accra y Busan, porque identificaban como malas prácticas algunas de la cooperación del Norte y también para evitar que se calificase su "cooperación". Esto perjudicó una mejora cualitativa de la declaración sobre cooperación. Lo mismo que la introducción del sector privado lucrativo como agente de cooperación.

Pero el debate sobre la cooperación S-S es una oportunidad para desvelar los errores y, también, aciertos de la cooperación N-S para que los nuevos países que entran como donantes en la cooperación, Brasil, Sudáfrica, etc. realicen las mejores buenas prácticas y los países tradicionales mejoren la suya.

En el Seminario se hizo una relación sobre cuales debieran ser los criterios que debe seguir la cooperación gubernamental y como los sindicatos, como actores de desarrollo, deben incidir para lograrlos, asumiendo una estrecha alianza con los movimientos sociales. El marco debe ser siempre guiado por los derechos humanos, que incluyen las normas de la OIT, junto con la reivindicación de la participación y auditorias sociales.

Se hizo un apartado específico sobre la cooperación intersindical, diferente a la incidencia de los sindicatos en las políticas gubernamentales de cooperación y su coherencia con los instrumentos comerciales, tecnológicos, etc. La cooperación intersindical ya está definida en los Principios de la RSCD, autonomía, apropiación, transparencia, rendición de cuentas, coherencia, inclusividad, equidad y sostenibilidad. El objetivo de la cooperación intersindical es extender el trabajo decente y siempre ser solidaria y horizontal.

Además, hubo discusión sobre los instrumentos financieros, aún más perentoria con la reducción de fondos de los países tradicionalmente donantes de la OCDE y, en el área latinoamericana, de España en particular. Se mencionó ampliar las posibilidades de captación de recursos acudiendo a las convocatorias internacionales (de la UE), o revisando la distribución de fondos entre los proyectos de la OIT, acogiéndose al Convenio 94 sobre procedimientos concursales, o en el PNUD. También valorizar el papel sindical, como agentes de desarrollo, en aquellos países nuevos en la cooperación. Sin olvidar la sinergia de unificar recursos en proyectos triangulares, N-S-S que faciliten experiencias y ahorros. Y siempre, una mejora de la autofinanciación de los sindicatos, tanto de un lado como del otro, para mejorar su autonomía.

En la segunda reunión, el Secretariado de la CSA presentó un Borrador de Plan de Acción derivado de las 19 Resoluciones de su último Congreso. Era realmente ambicioso, presentado por un equipo cohesionado, que abarcaba los retos en los próximos anos, en áreas de desarrollo sustentable; trabajo decente y libertad sindical; paz, democracia, participación y derechos humanos; autorreforma y unidad sindical; y desarrollo y fortalecimiento institucional.

Iba a discutirse en su Consejo Ejecutivo junto con un trabajo permanente de acompañamiento con las afiliadas y la reclamación ante todos los Gobiernos desde Canadá a Chile de una mejora de la fiscalidad, para que los sistemas fiscales de los países fuera más redistributivos y suficientes para proveer bienes públicos que garantizasen una sanidad y educación universales,
motores de un desarrollo sostenible.

Por último, nos fue anunciada la gira de miembros de su secretariado a los países de la UE y a las afiliadas a la CES para discutir el planteamiento superador de las cláusulas sociales en los Tratados comerciales para pasar a un debate integral sobre desarrollo.

Artículo de USO. Publicado originalmente el 5 de septiembre de 2012 en el sitio web de USO.