Esta nota sigue una primera nota conceptual sobre la inclusión del empleo decente y del trabajo decente como metas del marco de desarrollo para después de 2015.
La secunda nota, publicada en mayo 2013 examina detenidamente distintas opciones de lo que podrían ser las metas globales, los objetivos nacionales y los indicadores estadísticos que convendría utilizar para seguir de cerca los progresos realizados y servir como fuente de inspiración a la hora de concebirse las políticas.
La finalidad de esta nota es entablar un debate acerca de cómo podría expresarse un posible objetivo de desarrollo relativo al empleo en términos de metas e indicadores de progreso a nivel nacional.
La OIT se hace conclusiones:
• Si los encargados de la formulación de políticas a escala mundial deciden hacer de la creación de empleo y la mejora de los medios de vida un objetivo principal del marco para el desarrollo con posterioridad a 2015, se dispone de numerosos datos para elaborar metas e indicadores en el plano nacional.
• Debe existir un margen adecuado para escoger y adaptar las metas y los indicadores de conformidad con las circunstancias y las prioridades nacionales.
• La mejora de las estadísticas deben ser una prioridad debido a sus repercusiones en la rendición de cuentas, la transparencia y la eficacia en la elaboración de políticas.
• Hay que limitar el número de prioridades a escala mundial para que éstas sean concretas y medibles.
• Es importante vincular los objetivos, metas e indicadores mundiales con los objetivos, metas e indicadores nacionales. Las medidas a escala nacional siguen siendo el principal mecanismo para lograr un desarrollo sostenible.
