El Sr. Urai y el sindicalista Dinesh Goundar tienen que comparecer ante la audiencia prevista para el 31 de octubre con relación a una serie de acusaciones derivadas de un arresto anterior.

Ambos fueron acusados conforme a la Ley de Seguridad del Estado por haber simplemente celebrado una reunión sindical con vistas a preparar a los miembros a la negociación colectiva. Desde su arresto inicial, la policía ha estado disolviendo otras reuniones sindicales, e incluso reuniones sociales de sindicalistas han desembocado en interrogatorios durante horas a manos de la policía.

La CSI está también preocupada por el hecho que los sindicatos se vean dentro de poco obligados a volver a registrarse conforme a unas reglas nuevas y engorrosas, y que los convenios colectivos sean anulados según el recién aprobado Decreto sobre Industrias Esenciales. Estas medidas suponen un duro golpe para los derechos de los trabajadores en numerosos sectores económicos de Fiji y violan el derecho laboral internacional. No cabe duda de que el proceso de nuevo registro será utilizado para intentar destituir a actuales líderes sindicales y debilitar la capacidad de los sindicatos para representar a sus miembros.

La CSI lamenta el acoso continuo que están sufriendo los sindicalistas de Fiji y hace un llamamiento a las autoridades para que liberen de inmediato al Sr. Urai y retiren todas las acusaciones que pesan contra él y el Sr. Goundar. La comunidad internacional debe presionar al régimen para que cumpla los derechos humanos y sindicales fundamentales o, de lo contrario, implementar medidas políticas y económicas que provoquen las tan necesitadas reformas.