Bruselas, 10 de diciembre de 2008: La Declaración Universal de los Derechos Humanos celebra este año su 60º aniversario. Sindicatos del mundo entero participan en la conmemoración, consolidando los vínculos entre los derechos fundamentales del trabajo y los demás derechos humanos. Aunque el efecto de la Declaración Universal haya sido muy importante desde su creación, la tendencia de estos últimos años viene siendo de respetar cada vez menos los derechos humanos y sindicales.
“Hay que hacer todo lo posible para invertir la tendencia que apunta a restarle importancia a los derechos fundamentales”, declaró Guy Ryder, Secretario General de la CSI. “Es esencial que la crisis financiera mundial no sirva de pretexto para prolongar esta tendencia nefasta”.
Los derechos fundamentales se eluden en numerosos países, especialmente en Filipinas, Colombia y Guatemala. Desde 2001, 57 sindicalistas han sido asesinados en Filipinas. Con 39 muertos en 2007, Colombia sigue siendo el país más peligroso del mundo para los dirigentes sindicales, y aunque el número de muertes está disminuyendo ligeramente, prosperan otras formas de violencia e intimidación.
Guatemala le pisa los talones a Colombia en la triste clasificación de los países más peligrosos para los sindicalistas. La violencia estructural es cotidiana y el movimiento sindical está sometido a una represión permanente. Sobre un fondo de impunidad generalizada, los asesinatos y desapariciones se multiplican, mientras que los despachos y domicilios de los sindicatos son continuo objeto de saqueo.
Estos tres países son sólo algunos ejemplos de una lista demasiado larga en la que Zimbabwe y Birmania están también condenados. “Toda persona tiene derecho a disfrutar de los derechos fundamentales, sea cual sea su nacionalidad, color e identidad”, declaró Guy Ryder. “La libertad sindical y el derecho a la negociación colectiva forman parte integrante de esos derechos”.
La plataforma “Stop the Killings”, que agrupa a más de 60 organizaciones, conmemora el 60º aniversario de la Declaración de los Derechos Humanos organizando en el centro de Bruselas una marcha con antorchas. Con esta ocasión, la plataforma exigirá justicia para los periodistas, sindicalistas, obreros, activistas de los derechos humanos, abogados, jóvenes y todas las demás personas víctimas de la represión por el hecho de haber sido activistas de sus derechos elementales.
La campaña “Stop the Killings” se sitúa este año en el marco de la campaña “Trabajo decente, vida decente” que reivindica el derecho a un salario y un trabajo decente y el derecho de sindicalización.
Se ha previsto una concentración el miércoles 10 de diciembre, a las 18h30, en la Place de la Monnaie en Bruselas, a fin de alumbrar la triste realidad de estos asesinatos. Desde ahí, la marcha con antorchas se dirigirá hasta la Casa Sindical Internacional (ITUH), sede de la CSI, donde se inaugurará una obra de arte en memoria de las víctimas. Los participantes insertarán simbólicamente en la obra balas de mentira.
Para más información respecto a la marcha, contacte con Wim De Ceukelaire en el +32 484 11 92 31
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