"Una tasa o impuesto sobre las transacciones financieras aseguraría la financiación vital que se requiere para la creación de empleo y los programas mundiales para combatir el cambio climático y la pobreza en el mundo. Los gobiernos prometieron movilizar la financiación climática en la Cumbre de Copenhague, y esta tasa es una manera segura de hacer frente a los objetivos que se fijaron. Esta tasa también desalentaría la especulación improductiva y ayudaría a los gobiernos a fortalecer las finanzas públicas", afirmó la Secretaria General de la CSI, Sharan Burrow.

El llamamiento de los sindicatos en favor de esta tasa, que cuenta con el apoyo de una amplia diversidad de economistas así como de grupos defensores en el ámbito del desarrollo, el medio ambiente y la salud, ha ido ganando fuerza política. La CSI está ejerciendo presión en todas las principales instituciones mundiales como el G20, el FMI, el Banco Mundial así como para las negociaciones en la cumbre del clima de Durban en diciembre de este año y la Cumbre de Río+20, que se celebrará el próximo año en Brasil.

Una reunión de información sobre el tema de la reunión de esta semana en Bonn, una discusión a mitad de año de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CMNUCC), se transmitirá por Internet el 14 de junio a las 14.00 hora local (12.00 UTC/GMT) aqui